Jamás desesperes, pues de las nubes negras cae agua limpia y fecunda

(Proverbio chino)

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Cuando uno vive en las nubes es que está alojado en su mundo propio, sin atender a las preocupaciones y en un estado de permanente felicidad. Los artistas han mirado desde siempre el cielo y se han fascinado con las nubes en todas las épocas e integrándolas en sus obras. A medida que aumentaban los conocimientos científicos, el arte de representarlas ha ido cambiando.

Hacemos un recorrido por varias nubes.

Si alguna semana no has tenido tiempo para leer, te recuerdo que en este enlace tienes todas las publicaciones anteriores:

La tragedia del paisaje

Caspar David Friedrich. El caminante sobre el mar de nubes. 95 × 65 cm. Kunsthalle de Hamburgo.

Si hablamos de nubes, es imprescindible hablar de este caminante de Caspar David Friedrich (1774-1840) . El pintor se ha retratado a sí mismo de espaldas a nosotros, con una pose segura, contemplando la fabulosa naturaleza montañosa alemana desde un lugar privilegiado. Es la metáfora de un diálogo de grandes: entre la impresionante fuerza de lo natural y el ser humano, que tiene la capacidad de dominarla pero al mismo tiempo de sobrecogerse ante ella. ¡Qué poco se imaginaba el pintor que íbamos a ser capaces de destruir gradualmente el planeta y cambiar esa pose contemplativa por la de la soberbia!

En las obras de Friedrich hay una melancolía profunda y tienes la sensación de estar ante un paisaje trascendente pero, al mismo tiempo, triste. Este romántico no tuvo una vida fácil. Su madre murió cuando él aún era un niño y su hermana mayor cuidó amorosamente de sus nueve hermanos, mientras que su padre era muy autoritario. Con 13 años, sufrió un accidente mientras patinaba sobre hielo. Se cayó al agua y uno de sus hermanos se ahogó al salvarle. Quizás sin pretenderlo, esas tragedias están presentes en sus obras, que te recomiendo que recorras para comprobar su modernidad. En 2024 se celebra su 250 aniversario con numerosas exposiciones en Alemania y Suiza. Una buena oportunidad para conocerle mejor.

Cielos y nubes muy expresivos

John Constable. Estudio de marina con nube de lluvia. 22×31 cm. Royal Academy of Arts. Londres

Uno de los pintores que más se interesó por el cielo, las nubes y los cambios metereológicos fue John Constable (1776-1837). Más que un pintor de paisajes es un pintor de cielos porque, para él, era lo que daba expresividad al resto. La imagen es un buen ejemplo de la importancia que concedió al cielo en el total de su obra. El mar ocupa una sexta parte de la superficie y apenas se distinguen los barcos y las olas en él. Mientras, las nubes se presentan amenazantes y poderosas y la lluvia que descargan te estremece.

La región de Suffolk inspiró sus cuadros, hasta el punto de que se la llama “los paisajes de Constable”. Solía pintar desde lo alto de los campanarios de las iglesias, para tener una mejor visión del paisaje y plasmar su esencia.

John Constable y William Turner son los pintores románticos más relevantes de Reino Unido y sorprenden porque están profetizando el impresionismo y el arte abstracto sin saberlo.

Nubes en lugares insólitos