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Baila primero. Piensa después. Es el orden natural

(Samuel Beckett, 1906-1989)

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El baile ha sido históricamente el medio más utilizado para socializar con otras personas. Hasta hace dos generaciones las fiestas de los pueblos y sus verbenas eran la única opción para nuestros abuelos de encontrar pareja. Solo tienes que preguntar a gente nonagenaria y te contarán maravillas de los bailes que todos guardan en el recuerdo.

Casi cada baile trajo un escándalo consigo. El vals, destinado a la alta sociedad, nació a finales del XVIII como inmoral y se recomendaba solo para casadas. También fueron escandalosos el rock and roll de la década de 1950 o el tango argentino por adoptar poses y movimientos que recordaban el acto sexual. El rock era además una forma de entender la vida y en EEUU unió a blancos y negros por primera vez.

Te invito a bailar con los cuadros de Brueghel el joven, Laura Knight, Tom de Finlandia y Paula Rego.

Bailando hasta morir

Pieter Brueghel el joven. Los bailarines-de San Juan en Molenbeeck. 1592

En 1518 una mujer empezó a bailar en las calles de Estrasburgo sin poder parar durante cuatro días y decenas y hasta miles de personas se contagiaron de su entusiasmo de manera que bailaron durante días hasta caerse muertos por infartos, ataques epilépticos o derrames cerebrales. El hecho se conoce como la peste o la epidemia del baile de 1518. Los bailarines rogaban que les pararan y así se calmaban, pero si les volvían a soltar empezaban de nuevo sin remedio. Después de muchos muertos, el fenómeno desapareció de repente.

Nadie ha sabido explicar esta coreomanía con certeza. Algunos han apuntado a un efecto psicótico por ingesta de hongos. Otros a un hambre extrema de la población o a estados de trance, pero no se sabe a ciencia cierta. Pieter Brueghel el Joven (1564-1638) decidió plasmar el hecho unos 70 años después de que ocurriera, lo que demuestra que se contaba como una leyenda fascinante. Fue la undécima epidemia de baile de la historia, ya que no fue un hecho aislado, pero esta fue la más documentada y la última que se dio en Europa.

Las escenas que pinta Pieter Brueghel el Joven (hijo del artista llamado Pieter Brueghel el Viejo) fascinan por la cantidad de personajes y detalles con los que te cuenta los acontecimientos sociales de su tiempo. Ahí puedes ver cómo la gente festejaba, pasaba su tiempo libre, trabajaba o se vestía a finales del siglo XVI y hasta mediados del XVII. Observar sus obras es adentrarse en la historia como a través de un cómic. Te lo recomiendo.

El sonido del baile

Laura Knight. Appy Ampstead. 1940

Un montón de gente apiñada bailando alocada y festiva al compás de la música es la manera en que la pintora británica Laura Knight (1877-1970) representa esta escena en la que puedes oir el bullicio y el ambiente lúdico gracias a las poses en movimiento de cada figura. “Appy Ampstead” es el nombre de una feria anual en el parque de Londres de Hampstead Heath y así plasmó la artista el baile que se celebraba al atardecer.

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